Se dice que tener un jardín de infantes sólo para adultos cura los corazones y las pollas de los adultos trabajadores con problemas. "Hiciste lo mejor que pudiste hoy. Está bien, buen chico". El mejor momento para ser atendida con una voz infantil y un cuerpo tetona lleno de amor maternal. La maestra Saki acepta todo y confirma que cuidar a niños con la espalda descubierta y con cariño se ha convertido en un hábito. "Es hora de jugar. ¿Quieres tetas?"

VAGU-258 Que mi madrastra me enseñe a hacer el amor